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Philadelphia, Pa. – A federal class action lawsuit filed Friday alleges that thousands of parents and their children are illegally denied the opportunity to participate in the special education process due to the fact that they don’t understand or speak English. The complaint alleges that the School District of Philadelphia refuses to sufficiently interpret or provide parents with translated documents in a timely manner, preventing them from participating in meetings and making informed decisions regarding educational placements and services.
According to the complaint, as of the 2013-14 school year, there were 25,990 families in the District who did not speak English as their primary language, of which 19,000 families notified the District they wanted documents in their native language. In addition, 1,500 English Language Learners were receiving special education and 1,887 students with IEPs whose home language was not English.
One of the lead plaintiffs is Barbara Galarza, the mother of a 10th-grade student with ADHD, a learning disability, as well as a mood disorder. Ms. Galarza reads and speaks Spanish only. However, when District personnel discussed her child’s special education evaluations and Individual Learning Plan (IEP) with her, the District refused to provide her with the documents in Spanish, her native language. As a result, Ms. Galarza belatedly learned that her child had been diagnosed with an Intellectual Disability. She was not able to review the psychologist’s report before an in-person meeting to discuss it, could not read her child’s IEPs or monitor her child’s progress, as essential documentation was provided solely in English. When she needed to talk to school staff about her child’s math class, she could not speak to someone who knew her language.
“The school wouldn’t give me information in Spanish; they didn’t seem to care,” Ms. Galarza said through an interpreter. “I couldn’t understand what the District was telling me. They did not help me or my child so that she could do well in school.”
The lawsuit was filed by the Public Interest Law Center, the Education Law Center of Pennsylvania, and Drinker Biddle & Reath LLP on behalf of a class of children with disabilities and their parents who are Limited English Proficient. The lawsuit follows two administrative law hearings during which the hearing officer found that the District had violated the rights of the students and parents to meaningfully participate in their children’s education. However, the hearing officer also stated that he lacked the authority to order systemic change to remedy the situation.
“Active participation by parents is vital to the educational plan for a student with disabilities,” said Chanda A. Miller, a Drinker Biddle attorney representing the plaintiffs. “Yet, for the hundreds of non-English speaking parents in Philadelphia who have children with disabilities, their participation is unfairly denied because the School District has failed in its duty to translate essential planning documents.”
“When parents are shut out of the special education process, students suffer: they are denied access to critical services they need to make progress. This is why our civil rights and disability laws are so clear on the obligations of schools to provide language assistance to parents and students,” said Maura McInerney, Senior Attorney at Education Law Center.
The complaint asks the Court to order the District to provide complete and timely translations of special education documents; to notify parents that they are entitled to such documents in their native language; to provide sufficient oral interpretation services for key encounters pertaining to special education services; and to provide bilingual evaluations for all students who need them.
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Demanda desafia el distrito escolar de Filadelfia por no traducer documentos e interpretrar para los padres con dominio limitado de ingles y con hijos con discapacidades
Filadelfia, Pa- El viernes una acion colectiva federal se presento allegando que miles de padres y sus hijos han sido illegalmente negados de la oportunidad de participar en el proceso educativo especial debido a que no entienden o hablan ingles. La demanda alega que el distrito escolar de Filadelfia se niega a traducir o a dar a los padres documentos traducidos de manera oportuna impidiendo el acceso a los padres para las reuniones a los servicios educativos y actividades de colocación .
Según la demanda, a partir del 2013-2014 curso escolar, habían 25,990 familias en el distrito que no hablaban ingles como lengua primaria, de los cuales 19,000 familias notificaron al distrito que querían documentos en su lengua nativa. También, 1,500 estaban aprendiendo ingles estaban recibiendo educación especial y 1,887 estudiantes con planes de educación individualizada (IEPs) cuyo lenguaje en el hogar no es el ingles.
Una de los principales demandantes es Bárbara Galazar, la madre de un estudiante con ADHD en el grado 10th con problemas de aprendizaje y también con trastorno afectivo. La señora Galazar solo sabe leer y hablar español, sin embargo, cuando el personal del distrito evaluó la educación especial de su hijo para el plan individualizado (IEP) con ella, el distrito se negó a proveerla con una copia de los documentos en su lengua materna. Esto resultó que la señora Galazar se entero tarde que su hijo lo había diagnosticado con discapacidad intelectual.
Ella no fue capaz de revisar el expediente psicológico delante del personal en la reunión , no pudo leer el plan individualizado (IEP) o monitorear y apoyar el progreso de su hijo debido a que los documentos que se le dieron estaban solo en ingles. Cuando ella necesitaba hablar con el personal de la escuela sobre la clase de matemáticas de su hijo, no podía hablar con nadie porque nadie hablaba su idioma.
“El colegio no me daba la información en español, y no parecía importarles” dijo la señora Galazar mediante un traductor.“ No entendía lo que me estaba diciendo el distrito escolar. No me ayudaban y tampoco a mi hijo para que rindiera bien en la escuela.”
La demanda fue radicada por el Centro Legal por El Interés publico, El Centro legal Educativo de Pensilvania y Drinker Biddle & Reath LLP en nombre del grupo de niños con discapacidades y sus padres los cuales tienen un dominio limitado del ingles. La demanda continuo con dos audiencias judiciales y administrativas en las cuales el oficial de audiencia encontró que el distrito escolar había violado los derechos de los estudiantes y sus padres a participar relevantemente en la educación se sus hijos. Sin embargo, el funcionario de audiencia también encontró que no tiene autoridad para cambiar o recurso judicial.
“La participación de los padres es fundamental en el plan educativo de estudiantes con incapacidades” dijo Chanda A. Miller, una abogada de Drinker Biddle que representa a los demandantes.“ y todavía, cientos de padres que no hablan ingles en Filadelfia con hijos con discapacidades, su participación es injustamente negada porque el distrito escolar fracasa en su obligación de traducir documentos importantes del plan escolar”
“Cuando a los padres se les deja fuera del proceso especial educativo, los estudiantes sufren, se les niega el acceso importante que necesitan para progresar. Por esto nuestras leyes de derechos civiles y discapacidades son muy especificas en las obligaciones que tienen las escuela en ayudar a los padres y estudiantes,” dijo Maura McInerney, la abogada principal en el Centro Legal de Educación.
La demanda también le pide a la Corte que le ordene al distrito a ofrecer traducciones completas y diligentes de los documentos de educación especial que informen a los padres que tienen el derecho a esos documentos en su lengua nativa, proporcionar interpretación oral en encuentros sobre servicios de educación especial y ofrecer evaluaciones bilingüe a todos los estudiantes que lo necesiten.